Hace tres años, perfilé al quiosquero en mi barrio de Pamplona donde se podía comprar los diarios locales así como muchos periódicos y revistas nacionales y otros productos.
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En ese momento, el proprietario, Jesús Erro, que llevaba 24 años en el local, habló del declive del consumo de todos los productos impresos. La gran mayoría de su clientela tenía más de 50 años.
A lo largo de mis cinco años en Pamplona, nos hicimos amigos que conversábamos sobre la política, la economía y la cultura de nuestros países respectivos (el mío, EEUU).
El martes, el 19 de noviembre, él cierra la cortina. Es el momento justo, dijo. Nadie tenía interés en comprar el negocio y alcanzó la edad para jubilarse. Tiene un hijo adolescente y su mujer trabaja. Él no tiene planes para la próxima etapa en su vida.
Hay pocos sitios cercanos que venden la prensa nacional. Voy a echar de menos nuestras conversaciones.
La industria: Entre 2010 y 2018, el número de puntos de venta de prensa bajo el 25%, desde 538 a 405.
Aquí, un enlace a la entrevista original, Un quiosquero que apenas sobrevive la crisis.
Abajo, el vídeo de la entrevista a Jesús en 2016 (con subtítulos en inglés).