El País apuesta por lo digital y lo global


A la vez que El País de Madrid recorta la plantilla en España aumenta su presencia en Estados Unidos y México con portadas digitales dedicadas a las noticias en esos países.

Para los periodistas en España que padecen un colapso histórico de la industria — 7 mil periodistas despedidos en los últimos tres años — la expansión americana podría parecer un insulto. Pero tiene su propia lógica económica, aun si parece cruel.

La portada de la nueva sección

El País está apostando por lo digital y lo global donde ve un futuro más prometedor que en el impreso en España.

Más lectores en las Américas

El mercado mediático en España, con población de 47 millones, no se expande mientras que en EEUU, con 35 millones de hispanohablantes, y México, con 115 millones, hay posibilidades por crecimiento, específicamente en la edición digital.

 Más allá de estos países hay decenas de millones de usuarios potenciales en América Latina y por eso El País agrega personal en las Américas mientras que recorta puestos en España.

Lo digital es el futuro de la industria mediática, ha declarado muchas veces Juan Luis Cebrían, el consejero delegado del Grupo Prisa, compañía matriz de El País. Ha recibido críticas de sus propios periodistas por predecir el fin de la prensa impresa. Por eso, esta expansión modesta — seis personas más en la delegación en la Ciudad de Méxio — no es una sorpresa.

Audacia o desesperación

Prisa enfrenta una situación financiera desafiante: tuvo pérdidas de 451.000 millones de euros en 2011 con  una deuda de 3.800 millones. Por eso los ingresos de publicidad generados por las nuevas ediciones digitales no van a aftectar esta carga financiera a corto plazo.

La junta directiva de Prisa anunció el pasado viernes que habrá más recortes y el mismo día los empleados de la radio Cadena Ser, una parte de Prisa, hicieron una huelga de 24 horas para manifestar su desacuerdo con la decisión de eliminar 200 puestos en la emisora.

Entonces esta apuesta por lo digital no es tan audaz que podría aparecer. Un puñado de empleados más en una empresa con más de 10.000 no es nada. No hay mucho riesgo. De hecho podría ser una táctica de Prisa para distraer a las accionistas de las malas noticias que siempre se vuelven peores. 

En todo caso, esta iniciativa es un pequeño paso rumbo al futuro que nadie puede predecir. La cuestión es si han actuado suficientemente rápido para evitar un colapso total de la empresa.